Ojalá siempre un Di Stéfano así
“Todos estamos muy contentos del ambiente que había hoy. Ojalá que en todos los partidos pueda haber mucha gente, pero los chicos saben cuando será eso, en la fase de ascenso. Ojalá lo podamos conseguir”. Raúl González, que recuperó la sonrisa perdida en Majadahonda tras ver como sus chicos superaban a un gran San Sebastián de los Reyes con un Di Stéfano que tuvo el mejor ambiente de la temporada, se mostraba encantado con el apoyo recibido por parte de la afición blanca. Los 1.800 madridistas que se acercaron en la tarde del domingo a ver al filial madridista crearon una gran atmósfera que llevó al equipo a la victoria, pero ¿por qué esto no se repite más a menudo?
Reinier y Rodrygo
Es obvió que el debut de Reinier Jesús y la presencia de Rodrygo Goes, que volvía a jugar con el Castilla, provocó que muchos madridistas que habitualmente ven a los de Raúl por la televisión se animaran a ir a Valdebebas para presenciar en directo el partido de un equipo que sigue creciendo cuando se empiezan a jugar las cosas de verdad. Nadie quiso faltar a la fiesta, tampoco Florentino Pérez, presidente del Club, quien hizo acto de presencia por el Palco de Honor del Estadio Alfredo di Stéfano, arropando al equipo. Pero lo que necesita este grupo es que ese mismo ambiente que se vivió ante el Sanse, donde la afición apoyó hasta el final, se repita en los cinco partidos que se jugarán en el estadio Alfredo di Stéfano de aquí a final de curso, salvo que se luche por el ascenso.
Con opciones reales
El Castilla encara la recta final de la temporada a cuatro puntos de los puestos que permiten jugar la fase de ascenso a Segunda División y con la sensación de que el reto, que no hace tanto nadie se lo planteaba por el club, es posible. La llegada de Marc Gual y Reinier, sumado al apoyo puntual de Rodrygo, da un salto de calidad al equipo y la dinámica es muy positiva, ya que han sumado 11 de los últimos 15 puntos que se han disputado. Pero también necesita el aliento de una grada para dar un plus cuando las cosas se ponen complicadas.
El vestuario del Castilla es consciente de que este ambiente sólo lo volverán a ver si logran meterse entre los cuatro primeros para jugar los playoffs a Segunda, pero el madridismo debería dar un paso al frente y arropar a unos chicos muy jóvenes que no han dejado de progresar a lo largo del curso y que están ganando el derecho de soñar con todo.
De hecho, este apoyo debería empezar a notarse dentro de dos semanas, con la visita del Coruxo al Di Stéfano. El equipo gallego es un rival directo por estar en la zona de privilegio de la clasificación y el partido se antoja muy complicado, por ello mirar a la grada y ver a un gran número de madridistas dispuestos a animar hasta el final vendrá muy a Raúl y sus muchachos.
